Cierre (del jueves) y agradecimiento.

Cerrado el ciclo en los límites del fin de semana, el “Daily...” agradece a todos los participantes el esfuerzo que ha supuesto relatar en medio de unos días tan convulsos y llenos de emociones. Todavía en la planta de los pies, se dibuja la huella de los adoquines cordobeses. Los ojos deslumbrados por tanta belleza. la de las piedras y la de las personas. El corazón reconfortado por el beneficio del intercambio. Y el alma, sumida entre penumbras llenándose de duende andaluz .

Gracias a todos. Los que fuimos, los que estaban, los que escribieron, los que leyeron, los que comentaron, los que sintieron, los que explicaron, los que escucharon, los que mandaron, los que obedecieron, los que inmortalizaron y los que posaron. Todos... somos “Los Jueves”

                                                                         

Algo más.

The Daily Planet’s Bloggers, no puede mirar para otro lado y obviar la actualidad bloguera. Una realidad que engorda a nuestro alrededor, a veces, muy a nuestro pesar.

Nos preocupa y nos ocupa, la forma en la que el grupo se ve interferido por situaciones de difícil explicación. No se trata de iniciar unas reflexiones críticas sobre la citada actualidad, más bien queremos responder con explicaciones constructivas, que tanto escasean y en definitiva son las que deseamos y necesitamos.

No sabemos quien es Juliano el Apostata, (si, sabemos de quien se trata, pero la verdad es que no tenemos porque saberlo) Conocemos a un tal Gus, al que todos estos días, TODOS hemos echado de menos, pero también al que TODOS hemos llamado sin respuesta, buscado sin encontrar, regalado ánimos sin acuse de recibo, ofrecido calor obteniendo a cambio el mayor de los fríos silencios, y ese... sigue desaparecido. Ese, que nos ha dejado tirados en mitad de la travesía, con nocturnidad, alevosía, con motivo o sin él... ¿quién lo sabe y a quién le importa?

Ahora 15 días después, no puede aparecer de tapadillo, escondiendo la mano que lanzó la piedra en el medio de nuestro afecto. A algunos todavía nos sangra (el afecto, claro)

Juliano asoma la patita por debajo de la puerta, pidiendo respuestas y una vez más el grupo, (qué maravilla de grupo) lo olvida todo y de nuevo lo arropa, lo mima, se acurruca con él y le empuja del sillín para que le sea más leve la cuesta arriba.

Esas preguntas, con las que ha sustituido el relato de “Mis Jueves”  quieren ser una pormenorizada colección de dudas de verdadero calado personal, pero no muy diferentes de las que todos hemos tenido alguna vez.

Creíamos (mal creído) que el problema no pertenecía al ámbito existencial de los relatos de los Jueves, ni a la tremenda alternativa de elegir entre las muchas opciones de nuestra participación en el entorno juevero. Creíamos (mal creído) que ese era un tema, que por muy debatido estaba perfectamente claro y asumido.

Este texto podría parecer una trampa, para provocar y remover esa personalidad tan envidiada y admirada que posa sedimentada en el fondo de ese corazón maragato, ahora malherido. Pero no, no es ninguna trampa, el tiempo de las trampas, de los ruegos, de las demandas, de los ¿por qué...? Ya ha pasado.

Sabemos que este tipo de declaraciones, hechas en público, podrán no ser compartidas, incluso incomodar y por supuesto ser poco populares. Pero si los Jueveros” somos todas esas cosas que hemos certificado en nuestros relatos,  sabremos leer entre líneas, entender el revulsivo y patalear, que esa es otra emoción a la que también tenemos derecho.

Y a pesar de todo, seguimos esperándolo... porque tenemos unos libros para él, porque queremos contarle cosas de Córdoba, porque Clark le trajo un regalo de Tanzania, porque ¡¡YA ESTA BIEN!! de jugar al gato y al ratón (nosotros somos el ratón) y porque TODOS, que seguimos intentándolo no entendemos nada de todo esto.

Si sirve de algo, te dejo esto... tú mismo:

http://alfredo-laplazadeldiamante.blogspot.com.es/search/label/Aguaviva